El sol, el cloro y las pantallas pueden afectar la salud visual en vacaciones. Descubre cómo proteger los ojos de tu familia con cuidados esenciales.
Las vacaciones son el momento perfecto para desconectarte del estrés diario, compartir con quienes amas y recuperar energía. Pero también pueden ser el instante ideal para mirar hacia adentro y preguntarte: ¿cómo están mis ojos?, ¿y los de mi familia? La salud visual suele pasar a un segundo plano cuando la rutina diaria está llena de responsabilidades y actividades, por eso aprovechar los días de descanso puede marcar la diferencia entre prevenir a tiempo o lamentar después.
En esta nota de Bogota Laser Ocular Surgery Center te contamos por qué las vacaciones pueden convertirse en una excelente oportunidad para cuidar tu visión y la de quienes te rodean asistiendo a chequeos en nuestra clínica oftalmológica en Bogotá y protegiendo tus ojos del sol, el mar e incluso, ¡de tu celular! No dejes de leer.
¿Por qué hacer chequeos visuales en vacaciones?
Las vacaciones de mitad de año no solo son una pausa en el calendario académico, también representan una oportunidad ideal para ocuparte de la salud visual de tu familia. Durante este tiempo libre, sin la presión de las clases ni los compromisos laborales intensos, padres e hijos pueden organizar visitas médicas sin alterar sus rutinas. Conoce con más detalle las razones por las que deberías aprovechar este tiempo para garantizar la salud visual de los que más amas a continuación:
- Menos estrés, más tiempo para evaluar la salud ocular con calma: cuando no hay horarios escolares que cumplir, desplazamientos largos o reuniones constantes, acudir al oftalmólogo se convierte en una experiencia más tranquila. Este ambiente relajado permite que tanto niños como adultos se sientan más cómodos durante las evaluaciones y se logre una mejor cooperación, especialmente en los más pequeños, en los exámenes visuales que te puedes realizar en una clínica experta en oftalmología en Bogotá como nosotros.
- Permite iniciar tratamientos a tiempo antes del nuevo ciclo escolar: detectar y tratar un problema visual durante vacaciones da tiempo suficiente para iniciar tratamientos, adaptar lentes o planear intervenciones quirúrgicas, si son necesarias. Así, cuando llegue el nuevo ciclo académico, los estudiantes estarán listos para enfrentar sus tareas con una visión clara, mejorando su desempeño y concentración desde el primer día.
- Facilita la detección de alteraciones relacionadas con el uso excesivo de pantallas: durante el año escolar, el uso intensivo de dispositivos electrónicos puede causar fatiga visual, ojo seco o dificultades de enfoque. Hacer un chequeo en vacaciones permite identificar si el uso de pantallas ha generado efectos adversos en los ojos y definir medidas preventivas para el próximo semestre, como filtros especiales, pausas visuales o ajustes en la iluminación.
- Una medida preventiva que beneficia a toda la familia: los problemas visuales no afectan solo a los niños. Los adultos también pueden presentar cambios sutiles en su agudeza visual, molestias por presbicia o alteraciones derivadas de enfermedades como la diabetes o la hipertensión. Aprovechar las vacaciones para un chequeo conjunto refuerza la cultura del cuidado visual en familia y permite la detección de ojo seco y otras condiciones en etapas tempranas.
- Aumenta la conciencia sobre la salud visual infantil: muchos trastornos visuales en niños pueden pasar desapercibidos, pues ellos no siempre expresan sus síntomas de forma clara. Las vacaciones ofrecen la oportunidad de realizar una revisión profesional que podría detectar alteraciones como ambliopía, estrabismo o errores refractivos, los cuales, si se tratan a tiempo, tienen un mejor pronóstico a largo plazo.
Detección temprana de problemas visuales en niños y adultos
Identificar a tiempo una enfermedad ocular puede marcar la diferencia entre un tratamiento eficaz y un deterioro progresivo de la visión. Tanto en adultos como en niños, hay condiciones que avanzan silenciosamente y solo muestran síntomas cuando ya generan daños importantes, como:
- Pérdida visual irreversible: en enfermedades como el glaucoma, la pérdida de visión puede ser gradual y asintomática en sus primeras etapas. Si no se detecta a tiempo, el daño al nervio óptico es permanente. Un diagnóstico precoz permite iniciar tratamientos que controlan la presión intraocular y preservan la visión por más tiempo.
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- Desarrollo de ambliopía infantil: la ambliopía u “ojo perezoso” solo puede corregirse efectivamente si se detecta antes de los 8 años. Después de esta etapa, la plasticidad cerebral disminuye y se hace más difícil recuperar la función binocular completa. Un examen a tiempo evita secuelas que podrían acompañar al niño toda la vida.
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- Progresión acelerada de errores refractivos: miopía, hipermetropía y astigmatismo tienden a avanzar si no se corrigen adecuadamente. En los niños, esto puede afectar su aprendizaje y rendimiento escolar; en los adultos, puede interferir con su productividad y calidad de vida. Los controles regulares permiten ajustar los tratamientos según la evolución.
- Retraso en el tratamiento de enfermedades sistémicas con impacto ocular: patologías como la diabetes o la hipertensión arterial pueden generar daños en la retina sin síntomas visibles en las primeras fases. Las revisiones oftalmológicas permiten detectar signos tempranos de retinopatía diabética o hipertensiva, lo cual es clave para evitar complicaciones mayores.
- Aumento del riesgo de accidentes o caídas en adultos mayores: la disminución no detectada de la agudeza visual en personas mayores puede incrementar el riesgo de caídas, accidentes en casa o en la vía pública, y pérdida de autonomía. Identificar estos cambios permite tomar medidas a tiempo y preservar su independencia y seguridad.
Hábitos que dañan tus ojos en vacaciones
Aunque las vacaciones son un momento para descansar, algunos comportamientos frecuentes durante esta época pueden afectar tu salud visual sin que te des cuenta. En esta infografía te contamos cuáles son esos hábitos y cómo pueden impactar negativamente tus ojos. ¡Ponles atención!
Recomendaciones para cuidar tus ojos del sol durante las vacaciones
Durante las vacaciones, muchas personas aumentan su tiempo al aire libre, esto implica una mayor exposición al sol. Sin embargo, así como protegemos la piel con protector solar, también es fundamental cuidar nuestros ojos de los daños provocados por la radiación ultravioleta, tomando medidas de protección solar ocular como las siguientes:
Usa gafas con protección UV
No todas las gafas de sol protegen realmente. Algunas solo oscurecen la visión sin bloquear los rayos UV, pudiendo ser aún más perjudicial. Esto sucede porque la pupila se dilata con la oscuridad, permitiendo una mayor entrada de radiación dañina al ojo. Por eso, es fundamental elegir gafas con filtro UV certificado al 100%, que bloqueen tanto los rayos UVA como los UVB. Estas gafas reducen significativamente el riesgo de desarrollar cataratas, pterigión y degeneración macular con el paso de los años, según advierte el National Eye Institute.
Protege también a los niños
Los ojos de los más pequeños son más vulnerables porque el cristalino aún no ha desarrollado su máxima capacidad para filtrar la radiación ultravioleta. Esto significa que una mayor proporción de rayos nocivos llega directamente a la retina. Por esta razón, es crucial que los niños usen gafas de sol con protección UV desde pequeños, sobre todo durante actividades prolongadas al aire libre. La prevención en esta etapa puede evitar problemas visuales serios en la adultez, como alertan la American Academy of Ophthalmology y el NEI.
Usa sombreros o viseras de ala ancha
Estos dos accesorios son un excelente complemento a las gafas de sol, ya que bloquean parte de la radiación solar que entra por encima o por los lados de los lentes. De acuerdo con la American Academy of Ophthalmology, se estima que reducen entre un 30% y un 50% de la exposición ocular directa al sol. Son especialmente útiles cuando estás en movimiento o en espacios donde la luz solar rebota, como en la playa, la piscina o la nieve. Además, también ofrecen protección para la piel delicada alrededor de los ojos.
Evita mirar directamente al sol
Aunque parezca evidente, muchas personas cometen el error de mirar directamente al sol durante actividades recreativas o eventos como eclipses, sin protección adecuada. Esta acción puede provocar quemaduras en la retina, conocidas como retinopatía solar, que en algunos casos generan daños permanentes. Incluso una exposición breve puede afectar la visión central. Nunca mires directamente al sol sin filtros específicos aprobados para ello.
Ten cuidado con los reflejos
El sol no solo impacta de forma directa. Superficies como el agua, la arena, el concreto e incluso la nieve pueden reflejar hasta el 80% de la radiación UV, incrementando la exposición ocular sin que lo percibas. Por eso, es importante usar protección visual incluso en días nublados o si estás bajo sombra. Los rayos UV pueden atravesar nubes y penetrar sin darte cuenta, por lo que la constancia en el uso de gafas de sol certificadas debe mantenerse durante toda la jornada vacacional
Protección ocular frente al uso recreativo del agua
Actividades como nadar en piscinas, ríos o el mar se convierten en rutina durante las vacaciones. No obstante, estos espacios pueden representar riesgos importantes para la salud ocular si no se toman las precauciones necesarias. Aquí te contamos cómo cuidar tus ojos (y los de tu familia) durante estas experiencias acuáticas:
- Usa gafas de natación, incluso en piscinas tratadas: el cloro en el agua de las piscinas puede alterar la película lagrimal, provocando ardor, enrojecimiento y resequedad ocular. Además, no elimina por completo bacterias y otros microorganismos. Las gafas de natación evitan el contacto directo del agua con los ojos y previenen infecciones como la conjuntivitis.
- Evita abrir los ojos bajo el agua en ríos o mar: el agua de fuentes naturales contiene bacterias, parásitos o sedimentos que pueden irritar o incluso infectar los ojos. Acanthamoeba, por ejemplo, es un parásito presente en cuerpos de agua dulce que puede causar queratitis grave. Mantener los ojos cerrados o protegidos reduce significativamente el riesgo.
- Lávate los ojos con agua potable después de nadar: después de una jornada acuática, enjuagar los ojos con suero fisiológico o agua potable puede ayudarte a remover residuos irritantes, como sal, cloro o arena. Este tipo de cuidados visuales en piscina reducen la posibilidad de infecciones y mejoran el confort ocular.
¡Aprovecha el tiempo! Realiza tus chequeos visuales anuales en Bogota Laser
Las vacaciones no son solo una pausa en la rutina, también son una oportunidad para priorizar tu bienestar visual y el de quienes más quieres. En Bogota Laser Ocular Surgery Center ponemos a tu disposición un equipo médico altamente especializado, tecnología de última generación y espacios diseñados para brindarte una experiencia segura, cálida y confiable.
Los chequeos visuales en nuestra clínica de ojos son mucho más que una revisión de rutina: son un análisis completo del estado de salud de tus ojos, que permite detectar a tiempo alteraciones, prevenir enfermedades futuras y orientar el tratamiento más adecuado para ti o tu familia. Ya sea que presentes síntomas o que simplemente quieras estar al día con tu salud visual, este es el momento ideal para hacerlo.
No dejes que el tiempo pase sin revisar tu visión. En vacaciones, tú decides cuidarte.
Artículo tomado de Bogotá Láser.